Cuando escuchamos la frase de impacto “¡Cuida la efectividad de tu día!” pensamos en todo lo que nos resta hacer para lograrlo. Y es que, en muchos casos, como emprendedores, solemos preferir las jornadas extensas y exigentes, que una acción mejor planificada y corta, pero eficiente.
Allí donde el esfuerzo constante puede llevar a un desgaste físico y mental significativo, cuidar la efectividad de cada día puede ser una solución interesante y con múltiples beneficios.
Mantener un enfoque en la efectividad diaria puede marcar la diferencia entre el agotamiento y un día productivo y satisfactorio. Con estos consejos prácticos, podrás mejorar tu rendimiento, preservar tu energía y llegar al final del día con mayor motivación.
¡Tú puedes controlar la efectividad de tu día!
Para lograr resultados óptimos, es esencial tomar decisiones conscientes sobre cómo invertir tu tiempo y energía. A continuación, te compartimos estrategias clave que puedes implementar en tu rutina diaria para mejorar la efectividad de tu día emprendedor.
1. Diseña un plan realista la noche anterior.
El éxito comienza con una buena planificación, pero al ejecutarla no debes desgastarte. Digamos que defines las 10 tareas por lograr mañana, te preparadas para dormir y te acuestas liberando emociones, total, mañana será otro día para tener la oportunidad de elevar tu efectividad.
- Dedica unos minutos antes de dormir para organizar tus tareas del día siguiente.
- Prioriza las actividades más importantes y establece tiempos específicos para cada una.
- Tener un plan claro reduce el estrés y evita que pierdas tiempo decidiendo qué hacer al comenzar tu jornada.
- Cumple lo que planificas (esto es lo más importante en este caso).
- “Realista” quiere decir que cada definición te puede exigir hasta el “entrenamiento” o “nivel de ejecución” que puedas dar. Incrementa la presión poco a poco, nada “de golpe”.
2. Empieza con ejercicio lo más temprano posible.
Iniciar el día con actividad física no solo mejora tu salud, sino que también aumenta tu energía y claridad mental.
- Sobre tu cama al despertar puedes realizar una rutina de piernas, brazos y torso, con flexiones ligeras para estimular la circulación y relajamiento muscular realizando 2 repeticiones de hasta 10 ejercicios por tipo. ¡Encuentra tus movimientos!
- Luego, incorpórate adecuadamente sobre la cama, toma un vaso de agua y enfócate en realizar unos 20 o 30 minutos de ejercicio moderado: ejercicio sobre la silla, levantar mancuernas que tengas en tu habitación, realizar flexiones de piernas, etc.
- Los ejercicios pueden ayudarte a empezar con buen ánimo y una mente enfocada para enfrentar los retos del día pero “si sales al parque” (después de que los autos se hayan ido en la hora pico del inicio diario) podrías refrescar la mirada, correr al aire libre y regresar listo/a para elevar al máximo la efectividad de tu día.
3. Toma un desayuno nutritivo.
El desayuno es fundamental para alimentar tu cuerpo y cerebro, luego de las acciones anteriores, no es la idea que “recuperes energía” con excesos, esa es una idea o percepción que debes resolver para cuidar tu cuerpo.
- Opta por alimentos ricos en proteínas, fibras y carbohidratos saludables que te proporcionen energía sostenida.
- Un desayuno equilibrado mejora tu concentración y productividad desde las primeras horas.
4. Que tu ambiente de trabajo te ayude a rendir.
Si alrededor de tu campo visual, existen demasiados “elementos distractores”, tus pensamientos se van a desenfocar evitando que sostengas la efectividad de tu día.
- Un entorno organizado y libre de distracciones es clave para mantener la concentración, delante de tu mirada – si esta se dirige a tus herramientas de trabajo- no es buena idea colocar distractores.
- Asegúrate de que tu espacio de trabajo esté limpio, bien iluminado de día y de noche.
- Es importante que mantengas los equipos que necesitas en tu labor diaria.
- Personalízalo con elementos que te inspiren, como plantas o frases motivadoras que te “regresen” al enfoque que necesitas practicar.
5. Aplícate en tus horarios efectivos para ser más productivo/a.
Sin duda puedes elevar la efectividad de tu día eligiendo tus mejores horarios.
- Lo ideal es empezar el día trabajando con el mayor ritmo que puedes tener, pero eso dependerá de que termines el día descansando adecuadamente.
- Un concepto útil por revisar son los ciclos circadianos.
- Identifica las horas del día en las que eres más productivo y dedica esos momentos a las tareas más desafiantes.
- Si trabajas mejor por la mañana, aprovecha ese tiempo para abordar proyectos importantes.
- Reserva las actividades más rutinarias o administrativas para cuando tu energía sea menor.
6. Combina diferentes tipos de esfuerzo para rendir más.
Alternar tareas que requieran distintos niveles de esfuerzo físico y mental te ayudará a evitar el agotamiento y maximizar tu efectividad de tu día.
- Por ejemplo, después de una reunión intensa, realiza una actividad más relajada como organizar documentos o responder correos electrónicos.
- Este balance optimiza tu rendimiento a lo largo del día.
- También puedes considerar tareas de baja presión si necesitas recuperar energías pero seguir trabajando en tus proyectos.
- Delegar tareas a tu equipo de trabajo ayuda a dosificar el esfuerzo que te toca al emprender.
7. El teléfono distractor existe si le haces caso
Una de las afectaciones más graves a la efectividad de tu día a día la representa tu móvil.
- Las notificaciones constantes pueden interrumpir tu flujo de trabajo y reducir tu productividad.
- Establece momentos específicos para revisar tu teléfono y responde mensajes solo cuando sea necesario.
- Considera usar aplicaciones que bloqueen distracciones durante tus horas de enfoque.
Ideas clave sobre la efectividad de tu día
- Mantener la efectividad de tu día emprendedor no significa trabajar más, sino trabajar mejor.
- Aplica estos consejos en tu rutina diaria y notarás cómo tus días se vuelven más productivos y menos agotadores.
- Recuerda que cuidar de ti mismo es una inversión en el éxito de tu negocio.
- No puedes emprender con efectividad física-mental si tienes un elevado desgaste y no puedes gestionar tus actividades pensando en la efectividad de tu día.