Existen variadas reflexiones profundas en el día del trabajo que son necesarias de abordar para resolver, mejorar y crecer en el impacto social del trabajo hoy y son además, necesarias de tomar en cuenta e incrementarlas con mucho más por decir.
El trabajo como concepto necesita reforzarse porque crea: dignidad económica, autoconfianza en el presente y futuro, capacidad de integración y desarrollo en la familia, sostenimiento de la salud, orgullo personal por los logros alcanzados, identidad profesional y mucho más.
Sin embargo, el trabajo en sí mismo, como un fenómeno social, por razones diversas, no es todo lo real con lo que quisiéramos encontrarnos: No es del todo universal, no es expansivo sin limitantes, pareciera en la práctica un derecho que disfruta poca población, puede ser disminuido, parcialmente entregado (en términos de los beneficios que la ley establece), y ser mal pagado, lo que convierte a este factor clave de la economía, en un cascarón que siempre está fluctuando.
Y muchas veces aceptado sin más, distante de lo que debería ser, por los mismos trabajadores.
No es mi intención ser pesimista. En un sitio web como este, dedicado más bien al emprendimiento, el trabajo es inherente al emprendedor porque para serlo a cabalidad, es importante crearlo en cada negocio que hagamos con calidad. Sin más, reflexionemos.
1. Reflexiones sobre el trabajo y la realidad.
Existen variadas reflexiones profundas en el día del trabajo que vale la pena incorporar en el espacio de los negocios y que deberían también ayudarnos a resolver varios aspectos sociales.
El trabajo puede ser una fuente de realización personal y de contribución a la sociedad, pero también puede convertirse en una forma de opresión si no se respetan los derechos de los trabajadores y se abusa de su poder.
La cultura del trabajo excesivo y la obsesión por la productividad pueden llevar a la explotación de los trabajadores y a la deshumanización de las relaciones laborales, tanto como el trabajo precario, temporal o mal remunerado puede afectar gravemente la calidad de vida de las personas, su salud física y mental, y su capacidad para desarrollarse plenamente.
El trabajo puede ser una forma de resistencia y de lucha contra la opresión y la explotación, como lo han demostrado los movimientos obreros y sindicales a lo largo de la historia pero si seguimos pensando que esta idea no nos va a beneficiar porque viene de pensamientos con los cuales no compartimos tendencia, entonces qué deberíamos hacer ¿Abandonar los beneficios que gracias a ellos hemos obtenido? Nos hace falta bastante integración en lugar de ver la vida como un espacio político de colores.
Los trabajos repetitivos y monótonos que no permiten la expresión de la creatividad y la individualidad, hoy que se discute sobre la robótica y la inteligencia artificial, deberían ser candidatos a esa asignación, en lugar de convertirse en una fuente de alienación y de pérdida de identidad personal.
Con el trabajo, adecuado, podemos ganar autonomía económica e independencia, pero por mucho, existen espacios de exclusión que son necesarios de rediseñar, porque afectan a personas sin formación, con dolencias físicas, muchas veces a mujeres, y en general a personas que necesitan trabajar pero no "calzan". ¿Qué hacer ante este problema? Necesitamos resolverlo.
No hay nada como la existencia de trabajo como una forma de construir comunidades y de establecer vínculos de solidaridad de modo que la sociedad se beneficie con espacios de menor violencia y delincuencia, porque tiene un efecto similar al deporte y la cultura y los tres, podrían ser en efecto una gran estrategia social de cambio profundo.
Quiero añadir 3 ideas positivas finales que quizá no nos aparecen al pensar en el trabajo:
- El trabajo puede ser una forma de promover la justicia social y la equidad, a través de políticas públicas que garanticen la igualdad de oportunidades y el acceso al trabajo digno para todas las personas.
- El trabajo puede ser una fuente de aprendizaje y de crecimiento personal, siempre y cuando se permita a los trabajadores desarrollar sus habilidades y capacidades y se les brinde la oportunidad de innovar y de proponer soluciones creativas.
- El trabajo puede ser una forma de construir una sociedad más justa y sostenible, a través de prácticas empresariales responsables y respetuosas con el medio ambiente y los derechos humanos, y de políticas públicas que promuevan la transición hacia una economía verde y justa.
2. El rol del empleador de cara al trabajo
Como parte del desarrollo de reflexiones profundas en el día del trabajo, no podemos olvidar el rol que tenemos los emprendedores (empresariales o no) como empleadores. Y es que el empleador, en muchos casos al dirigir el trabajo de otros, asumimos responsabilidades que llegan hasta la creación de oportunidades y satisfacciones personales y familiares de las cuales, a veces no somos conscientes.
Al hacerlo - dirigir el trabajo- ejercemos una gran responsabilidad en el bienestar de nuestro equipo de trabajo, de modo que influimos directamente en la calidad del empleo que ofrecemos y en el impacto social y ambiental que provocamos.
El rol del empleador es fundamental en la creación de empleo digno y en la promoción de una cultura empresarial ética y sostenible, debido a que tenemos la responsabilidad de garantizar que las condiciones de trabajo sean seguras, saludables y respeten los derechos laborales, incluyendo un salario justo, la seguridad social, la igualdad de oportunidades, el respeto a la diversidad y la no discriminación en el lugar de trabajo , promoviendo un ambiente laboral justo y respetuoso.
Crear empleo de calidad, permite a los trabajadores desarrollar sus habilidades y capacidades y mientras se desarrolla una perspectiva de carrera a largo plazo. Esto incluye ofrecer oportunidades de formación y capacitación, de innovación y de crecimiento personal y profesional.
Por último, el empleador tiene una gran responsabilidad social y ambiental en el impacto que su empresa tiene en la sociedad y el medio ambiente. Es importante que los empleadores asumamos un enfoque responsable en las prácticas empresariales, promoviendo lo sostenible y ético a lo largo de la cadena de suministro, y en el uso de los recursos naturales.
3. El rol de la Ley frente a la realidad del trabajo
El rol de la ley es fundamental en el ámbito laboral y forma parte de las reflexiones profundas en el día del trabajo que debemos también realizar, ya que tiene la responsabilidad de proteger los derechos laborales de los trabajadores y de garantizar que se respeten las normas y regulaciones en materia de empleo. La ley establece las condiciones mínimas de trabajo, los derechos y deberes de los empleadores y los trabajadores, y las formas de solucionar conflictos laborales.
El punto clave es: ¿La Ley garantiza todo esto en materia laboral? ¿Qué hacemos todos por cumplirla? ¿Están haciendo bien su trabajo los responsables de la creación de leyes laborales?
Supongo que el primer paso es que todos aceptemos el rol de la ley frente a la realidad del trabajo, como una de las reflexiones profundas en el día del trabajo sin dejar de lado que la ley laboral es una pieza clave en el desarrollo del trabajo con respecto de los puntos anteriores.
Entre las principales funciones de la ley en el ámbito laboral se encuentran:
- Establecer los derechos y deberes de los empleadores y los trabajadores, así como las condiciones mínimas de trabajo, incluyendo el salario mínimo, las horas de trabajo, el descanso semanal, las vacaciones y los días de enfermedad.
- Promover la igualdad de oportunidades y la no discriminación en el lugar de trabajo, protegiendo a los trabajadores contra cualquier forma de discriminación por motivos de género, edad, raza, religión, orientación sexual, entre otros.
- Proteger la seguridad y salud de los trabajadores, estableciendo normas y regulaciones en materia de seguridad en el lugar de trabajo, y garantizando que los empleadores cumplan con las normas establecidas.
- Promover la negociación colectiva y el derecho a la libertad sindical, permitiendo a los trabajadores organizarse en sindicatos y negociar colectivamente con los empleadores para mejorar sus condiciones de trabajo.
- Garantizar el acceso a la justicia laboral, estableciendo procedimientos justos y eficaces para la resolución de conflictos laborales, y sancionando a los empleadores que violen las normas laborales.
Sergio González.
Director de Overflow Emprende EIRL