No tienes que resignarte al cansancio y la rigidez muscular. Incorporar ejercicios en la silla de tu escritorio es una forma sencilla y efectiva de revitalizarte, mejorar tu postura y aumentar tu productividad sin necesidad de abandonar tu puesto de trabajo.
El sedentarismo es un problema común en el entorno laboral, especialmente para los emprendedores que pasan largas horas frente al ordenador.
En este aporte vamos a revisar 5 propuestas generales de este tipo de ejercicios de oficina que a todo trabajador y emprender le ayudan a sobre llevar al dolor o el entumecimiento prolongados en el horario laboral.
También puedes leer: ¿Cómo organizar mejor el tiempo sin perjudicar mi salud?30
Beneficios de los ejercicios en la silla de tu escritorio.
Los ejercicios en la silla de tu escritorio ofrecen una amplia gama de beneficios para tu salud física y mental. Al romper con la inactividad, estimulas la circulación sanguínea, reduces la tensión muscular, mejoras tu concentración y aumentas tus niveles de energía. Además, estos ejercicios te ayudan a prevenir dolores de espalda, cuello y hombros, comunes en quienes pasan muchas horas sentados.
Si en tu trabajo necesitan fortalecer estos conceptos con un taller especializado contamos con una propuesta ideal que puedes revisar aquí: Balance Físico Mental para el desarrollo de equipos.
1. Estiramientos para liberar la tensión.
Los estiramientos son fundamentales para aliviar la tensión acumulada en los músculos debido a la postura prolongada.
- Incorpora ejercicios en la silla de tu escritorio como estirar los brazos por encima de la cabeza, rotar los hombros, inclinar la cabeza hacia los lados o estirar las piernas.
- Mantén cada estiramiento durante unos segundos y repite varias veces.
- Te en cuenta que una silla de posición fija puede llegar a ser una mejor aliada para este tipo de movimientos, descritos a lo largo de este aporte.
2. Movilidad articular para la flexibilidad.
La movilidad articular es clave para mantener la flexibilidad y prevenir lesiones.
- Hacer círculos con los tobillos, muñecas y cuello son ejercicios en la silla de tu escritorio que contribuyen a lubricar las articulaciones y a mejorar la amplitud de movimiento.
- Apunta que es mejor desarrollarlos suavemente sin buscar brusquedad o velocidad.
3. Fortalecimiento muscular para la postura.
Fortalecer los músculos que sostienen la columna vertebral es esencial para mantener una buena postura y reducir el dolor de la falta de movimiento en esa zona del cuerpo (un tipo de dolor muy común en la oficina).
- Incorpora ejercicios en la silla de tu escritorio como contracciones abdominales, elevaciones de talones o isométricos de piernas.
- Estos ejercicios te ayudarán a fortalecer los músculos de la espalda, el abdomen y las piernas, mejorando tu postura y reduciendo el riesgo de dolores.
4. Respiración consciente para la energía.
La respiración consciente es una herramienta poderosa para revitalizarte y reducir el estrés.
- Para utilizarla realiza ejercicios en la silla de tu escritorio como inhalar profundamente por la nariz, retener el aire por unos segundos y exhalar lentamente por la boca.
- Este simple ejercicio oxigena tu cerebro y te ayuda a sentirte más alerta y concentrado.
- Una especialización muy interesante de este ejercicio la comprende la respiración ayurveda.
5. Pausas activas para la productividad.
Las pausas activas son breves descansos que incorporan movimiento para romper con la monotonía y mejorar la productividad.
- Incorpora ejercicios en la silla de tu escritorio durante estas pausas o utiliza la zona circundante de tu posición en el escritorio.
- Puedes combinar estiramientos, movilidad articular, fortalecimiento muscular y respiración consciente. Estas pausas te ayudarán a mantener la energía y la concentración a lo largo del día.
Los ejercicios en la salid de tu escritorio son un hábito que aporta totalmente a tu bienestar
- Incorporar ejercicios en la silla de tu escritorio en tu rutina diaria es una inversión en tu bienestar.
- Al dedicar unos minutos a moverte y estirarte, no solo alivias la tensión muscular y mejoras tu postura, sino que también aumentas tu energía, tu concentración y tu productividad.
- Este hábito sencillo puede transformar tu jornada laboral y mejorar tu calidad de vida.