Céntrate en la visión que construyes tú - Overflow.pe

Céntrate en la visión que construyes

Cuando pienso en la frase "Céntrate en la visión que construyes tú", es porque de algún modo, desde fuera, alguien juzgó el "modo actual" de mi camino hacia el futuro, en el que vivo concentrado.

Al mismo tiempo reflexiono y concluyo lo siguiente: "Entiendo que nadie, tiene la misma visión sobre los niveles de éxito que vale la pena celebrar, sean del tamaño que sean".

Esto ocurre principalmente debido a que todos somos diferentes, adquirimos conceptos que nos guían, nos proyectamos y dependemos de ideas diferentes y de algún modo, nuestro estilo de vida, aprende a valorar -desde la experiencia- de modo distinto, si nos comparamos con alguien.



Céntrate en la visión que construyes por tu cuenta

Sobre la visión futura de algo que hoy es un minúsculo detalle o simplemente no está completa o materializada o sobre los retos que debemos estar dispuestos a correr para salir adelante, en la mayoría de los casos, en cuanto a su aceptación, construcción y entendimiento, los emprendedores estamos ciertamente solos.

Con el tiempo aprendemos que si el mensaje que seguimos es: "Céntrate en la visión que construyes", debemos centrarnos al mismo tiempo, en quienes sienten, suman, aportan, nos siguen de buena fe y por qué no decirlo: admiran nuestras capacidades, empuje y ganas de salir adelante.

Centrarte en la visión que construyes, implica dedicación, esfuerzo, concentración y mucha energía mental y física para administrar acciones que te empujen directo a tus metas, las cuales necesitan establecerse de forma realista, pero intensas.

Y una parte del tema consiste en evitar que el Emprendimiento se convierta en un Emprendi-Miento. Así que a cuidar mucho si nos auto-engañamos o si no sabemos reconocer en los demás, las verdaderas intenciones.

¿Y en medio de esa soledad qué debes hacer para alcanzar tu visión?

En principio, cuando llegan las opiniones que pueden ser buenas o malas, gustarte o no, necesitas poner al costado las emociones y recibirlas como ideas que sin embargo, podrías considerar y revisar.

El mundo siempre te va a manifestar algo en contra o a favor y te aseguro que no necesitas filtrar las ideas que no te gustan, pues con mucha probabilidad, allí hay aprendizajes enriquecedores también.

Luego, necesitas concentrarte mucho en los elementos de tu visión para desarrollar o adquirir capacidades y herramientas, desde la experiencia, acciones de aprendizaje y sobre todo mucha interrelación con el mundo emprendedor por un lado, y por tus clientes del otro.

Los emprendedores nos vamos a sentir solos en muchos momentos, pero lo importante es que tomemos el ritmo de trabajo de forma ágil y oportuna, respecto de la visión, del camino y del encuentro con nuestros objetivos.

Todo esto puede convivir perfecto si en la cabeza te retumba "Céntrate en la visión que construyes", ya que finalmente, las decisiones de visión las tomas tú.



¿Cómo evitar centrarte en la visión de los demás y destruir tu crecimiento de futuro?

Hemos hablado de diferencias entre personas y también de opiniones sobre tu propia construcción. Y no se trata de mirar a los demás como "atacantes" sino como "retos".

  • Evita afectarte con las opiniones de los demás, sobre todo si no conocen lo que necesita hacerse para alcanzar el éxito que estas alcanzando.
  • Los caminos personales, no necesariamente son entendibles por la mayoría, pero cuidado: no practiques el "autoengaño".
  • Las diferencias con los demás, al respecto de nuestra idea de negocio o emprendimiento, son externalidades cuando llegan hasta nosotros desde el otro y nos causan aprecio o rechazo, controla esas emociones y toma lo mejor en cada situación.
  • Cuando las opiniones son motivadoras nos impulsan, inspiran o conectan, pero también debes asumir que algo que te impulsa necesita validación, recuerda que los zapatos los gastarás tú y "gurúes" existen demasiados.
  • Si no sientes ni lo uno ni lo otro, tienes la opción de ser oscuridad o vacío (algo que no recomiendo) porque finalmente es como sentarse a esperar, no querer cambiar aunque la realidad cambie o aferrarse a las acciones de siempre aunque no funcionen.
  • La mejor idea puede provenir de convertirte en luz y creación por cuenta propia (el balance ideal).
  • Recuerda que somos seres conectados y siempre tendrás a la mano una influencia por la cual sentir algo, así que el consejo final es que tomes mano de tu independencia y practiques una vida llena de coherencia y criterio en la toma de decisiones y acciones.