Machu Picchu reabrió en noviembre, uno de los sitios turísticos de Perú, más visitados del mundo.
Reabrió sus puertas a los visitantes diarios esta semana por primera vez desde marzo. La antigua ciudadela incaica, que anteriormente recibía hasta 5.000 viajeros por día en la temporada alta pre pandémica, ahora sólo permitirá 675 visitantes por día.
Machu Picchu reabrió en noviembre
Ocho meses después de que la pandemia de coronavirus provocara el cierre de Machu Picchu, las autoridades peruanas celebraron el domingo una ceremonia de reapertura del sitio en la que se destacaron las tradiciones locales, así como la recepción de un sello de "Viajes seguros", una norma mundial de protocolos de salud y seguridad establecida por el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC).
"Hoy me enorgullece entregar el sello de Viajes Seguros al destino de Machu Picchu. Ahora los visitantes tan pronto como piensen en volver a nuestra maravilla del mundo estarán seguros de que aquí se siguen estrictos protocolos de bioseguridad. El turismo está regresando, de manera responsable y gradual", dijo la Ministra de Turismo Rocío Barrios en la ceremonia.
La reapertura de Machu Picchu da inicio a nuevos esfuerzos para reiniciar el turismo en Perú, incluyendo la reapertura de las fronteras terrestres y la reanudación de los vuelos desde Ecuador, Bolivia, Paraguay, Colombia, Panamá, Uruguay y Chile. Según la Oficina de Turismo del Perú, en octubre se reanudaron los vuelos internacionales de menos de ocho horas de duración.
A partir del 1º de noviembre los vuelos estadounidenses al Perú podrán reanudarse desde Atlanta, Houston, Los Ángeles, Miami, Orlando y Nueva York.
Este verano, las tasas de mortalidad por coronavirus del Perú estaban entre las más altas del mundo, mientras que América del Sur luchaba con el recuento de casos.
El ciudadano japonés que visitó Macchu Picchu
En octubre, el popular destino de excursiones se abrió por un día a un afortunado viajero de Japón que había estado viviendo en la zona desde que se quedó varado en el país cuando entró en cierre en marzo. Jesse Katayama, de 26 años, dio lecciones de boxeo a niños en Aguas Calientes durante varios meses antes de que el gobierno permitiera que el sitio se abriera para él. Los habitantes de la zona habían llevado el caso de Katayama al Ministerio de Cultura peruano antes de su salida programada del país, y los funcionarios hicieron una excepción.
"Había llegado a Perú con el sueño de entrar", dijo el Ministro de Cultura peruano Alejandro Neyra a los reporteros en ese momento en una conferencia de prensa, señalando: "Todavía estamos en medio de una pandemia". Se hará con todos los cuidados necesarios".
Perú está pasando por fuertes momentos políticos este mes de noviembre por si lo del coronavirus fuera poco y el ciudadano común no le basta con visitar sitios web para apuesta al league of legends o ver películas en casa, saber que uno de sus monumentos más importantes y que más fuentes de ingreso le trae al país puede ser noticias que refresquen el humor del país y ayude a bajar la preocupación que han vivido los peruanos durante esta crisis por la pandemia.