Todo en cuanto humano, cambia con el transcurrir del tiempo, y mientras antes nos enfrentaba a nosotros mismos, luego, de lejos, hasta puede parecernos insólito, haber formado parte.
El problema de no ser consciente del devenir, es que nos mantiene presos del ego, de las emociones, del descontrol y de la falta de visión.
Hallar espacios de paz, también depende de aceptar este tipo de variables y de construir internamente, lo necesario para ejercer junto a ellas una mejor vida.
Cambio en el Lenguaje
El "cambio", como palabra, implica un antes y un después que afecta el estado de pensamiento y detona modificaciones en los enfoques de acción que se desarrollan como consecuencia. El cambio como proceso, es probablemente, el último estadío de una serie de acontecimientos importantes en cada uno de nosotros.
Esos acontecimientos son inevitables y pueden originarse en el intercambio, la interacción, la sociabilización, el aprendizaje, el des-aprendizaje, la observación u otro tipo de acciones o relaciones humanas. Pero también pueden venir desde lo bueno o desde lo malo, y movilizarse en cualquier sentido. Lo ideal es que tomemos el camino más verdadero posible.
Cambio en la Mente
Dicho lo anterior, el cambio se concreta en sí mismo, como un análisis racional, emocional y perceptivo. Y es la mente entonces, quien asume el liderazgo de todo aquello que lo materializa, controlando la explosión de aquellos detonantes inherentes a la transformación. Por ello es que una vez instalado, muchas veces es percibido por los demás, cuando el proceso está avanzado.
Es por ello que los procesos de cambio que concluyen en forma efectiva, los notas tú y los sientes tú primero para luego ser advertidos por los demás, cuando simplemente, no queda nada de tu yo anterior o en todo caso, muy poco.
El rezago válido de tu pasado, será la mejor base para la construcción de tu proyección futura. Sin embargo, lo que importa, es cómo sostienes el cambio hoy.
Cambio positivo
Y allí, cuando hablamos de futuro, validez, sostenimiento y construcción, nos referimos al cambio positivo que crea acciones positivas. Ese tipo de cambio es el que debes buscar siempre, y sólo él, te llevará a un mejor aterrizaje, en cada una de tus etapas de desarrollo personal.
Se dice que el cambio es una constante de la vida, es por ello que el cambio positivo se da siempre en el hoy. Jamás estará anclado en el pasado o buscando respuestas en el futuro. Si vives hoy, cambia hoy, lo demás, tan sólo son excusas para empalagarte con tu estado anterior.
¡Todos los éxitos!
Sergio González
Director Overflow Emprende