"Siempre hacia delante" no es una frase nueva, ni poco escuchada. Todos, alguna vez, hemos sido motivados con esta frase emocionante que nos ayuda a no mirar atrás.
- No mirar errores.
- Malas experiencias.
- Decisiones a destiempo.
- Compañías nada adecuadas.
- Etc
¿Pero qué significa para un emprender orientarse hacia delante? ¿Esperar a que algo ocurra en el futuro?
¿Empujar todo lo necesario para alcanzar una meta? ¿Hacer que el equipo se comprometa con una visión de largo plazo?
Sí. Eso y mucho más.
Ir hacia delante es, como dirían los físicos, la resultante de dos fuerzas que en el emprendimiento surgen: el miedo de no lograrlo y el deseo que quererlo hacer.
¿Qué inunda de miedo a los emprendedores?
- Que nada funcione o reaccione ante nuestro esfuerzo.
- Desarrollar equipos ausentes que no se motiven.
- Los escenarios incomprendidos.
- El futuro que no podemos prever.
- Todo lo exógeno sin control.
- El fracaso previo recordándonos las peores decisiones.
- La desconfianza de nuestros entornos sociales.
- Y mucho más.
Según cómo reacciones ante el miedo como emprendedor, aprenderás que puedes llegar a detenerte en definitiva, temporalmente o impulsarte con mucha mayor energía.
¿Hacia dónde te impulsa el miedo en general?
Antes de responder ten en cuenta que muchos de los argumentos del fracaso emprendedor se centran en el miedo.
¿Qué nos hace sentir el deseo de emocionarnos con nuestras metas?
En general, condiciones, capacidades, descubrimientos, potenciales internos y todo lo positivo que podrías aprender a generar o recibir:
- Darle a cada espacio y evento el peso que realmente tiene.
- Promover y esperar cambios positivos como si se tratase de lograr un balance.
- Aceptar de los demás, todo lo positivo.
- Estar dispuestos a romper esquemas condicionantes.
- Actuar en consecuencia con el plan y escalarlo si necesitas cambiarlo por respeto a la meta.
- Enfocarnos a los demás con honestidad y coherencia.
Sólo una actitud enfocada en la mejor versión de nuestra pasión emprendedora podrá llevarnos hacia delante, allí donde el éxito, tarde o temprano, nos espera.
Para finalizar te recomiendo leer este artículo de Blog Emprendedor: 12 valores reflexivos que construyen tu éxito emprendedor. ¡Disfrútalo y compártelo!