La cultura corporativa no es un concepto abstracto ni exclusivo de grandes corporaciones globales. Se trata de la forma en que una empresa respira, piensa y actúa cada día, guiada por principios y hábitos que fortalecen la colaboración, la motivación y la confianza interna.
Emprender el desarrollo de la cultura corporativa es invertir en un camino estratégico para garantizar que todas las personas de la organización trabajen alineadas hacia un mismo propósito.
Esta necesidad de darle importancia no es nueva. A lo largo de la historia, las organizaciones exitosas han marcado la diferencia al construir una cultura basada en principios claros, donde las personas son el centro y la estrategia respalda la colaboración interna para lograr resultados sobresalientes.
Cultura corporativa: Una energía estratégica que todos los emprendedores necesitamos establecer.
Como emprendedores, directores de nuestro propio negocio, necesitamos gestar este valioso enfoque de estrategia empresarial para incorporarnos con éxito en los mercados que abordemos, al tomar en cuenta que, todo lo que logremos, bueno, malo, elevado o ínfimo, es consecuencia del nivel de cultura corporativa que desarrollemos.
Importancia de la cultura corporativa en las organizaciones.
La cultura corporativa define la manera en que una empresa piensa, siente y actúa en cada decisión, proyecto e interacción. Es el corazón que garantiza que todas las personas trabajen con un propósito común y contribuyan a crear un ambiente donde la colaboración, la responsabilidad y la confianza fortalecen tanto a la organización como a su equipo humano.
Sergio González, director de Overflow Emprende, señala siempre un punto clave vital de reconocer entre emprendedores y líderes empresariales: “Las empresas no existen, existen las personas”
Relación de su definición con las organizaciones capaces de alcanzar el éxito.
El éxito es tarea de todos, es sinergia, convicción de equipo, logro integral.
En ese sentido, podemos entender que la cultura corporativa se posicione como el medio, canal, estrategia o escenario que hace viable alcanzar el éxito en las organizaciones.
Y esto sucede porque la cultura basada en principios claros y asumidos por todos aumenta su capacidad para adaptarse a entornos cambiantes y su quehacer y resultados se vuelven sostenibles.
La definición de la cultura organizacional o cultura corporativa no es solo un concepto teórico, sino un camino práctico para garantizar que todas las personas trabajen alineadas hacia los mismos objetivos.
Historia del término “cultura corporativa”-
El concepto de cultura corporativa comenzó a estudiarse en la década de 1980, cuando expertos en management y comportamiento humano observaron que las organizaciones exitosas no solo destacaban por su estrategia comercial, sino por la fuerza de su cultura interna.
Autores como Edgar Schein contribuyeron a darle forma al término al investigar cómo las normas, los hábitos y los valores afectan directamente la eficiencia, la adaptabilidad y la motivación en una empresa, sentando las bases para lo que hoy conocemos como cultura corporativa u organizacional.
Hablemos de elegir objetivos meta y desarrollarlos en la cultura corporativa
Una forma práctica de aplicar todo lo señalado puede verse en la propuesta de Overflow Emprende cuando realizamos consultoría guía para el desarrollo de la cultura corporativa. En este caso mostraremos 5 objetivos meta que pueden implementarse, junto a sus valores constitutivos:
| Beneficio Meta | Acciones de cultura corporativa | Consecuencias positivas para la organización |
|---|---|---|
| 1. Fortalecer la confianza interna | Ponerse en el lugar del equipo, Comunicar para construir confianza, Valorar el esfuerzo y reconocer logros | Fomenta un clima donde cada persona se siente respaldada y respetada, fortaleciendo el vínculo con la empresa |
| 2. Mejorar la motivación y el compromiso | Escuchar antes de responder, Valorar el esfuerzo y reconocer logros, Fomentar un clima laboral sano y humano | El reconocimiento y la escucha hacen que las personas se sientan tomadas en cuenta e involucradas |
| 3. Reducir tensiones y conflictos | Comunicar para construir confianza, Liderar con consideración en momentos difíciles, Transformar conflictos en oportunidades para unir al equipo | Al abrir canales de comunicación y mostrar consideración, los conflictos tienden a resolverse antes de escalar |
| 4. Impulsar la colaboración y la creatividad | Construir un ambiente de respeto y colaboración, Fomentar un clima laboral sano y humano, Transformar conflictos en oportunidades para unir al equipo | El clima de apertura y respeto aumenta la disposición para colaborar e innovar en equipo |
| 5. Aumentar la retención de talento | Valorar el esfuerzo y reconocer logros, Construir un ambiente de respeto y colaboración, Liderar con cercanía para alcanzar mejores resultados | Al sentirse apreciadas y acompañadas, las personas prefieren quedarse y desarrollarse en la empresa |
Casos latinoamericanos de cultura corporativa sólida
Hablar de cultura corporativa es hablar de cómo una empresa construye un sello distintivo alrededor de su equipo, de su relación interna y de la experiencia que brinda al cliente. Es un fenómeno presente en América Latina en organizaciones que han sabido darle valor al clima interno y a la conexión humana como eje de crecimiento.
Restaurantes del Grupo Acurio (Perú):
El chef Gastón Acurio y su equipo han construido una cultura corporativa basada en la colaboración, la innovación y la responsabilidad social. El éxito de marcas como Astrid & Gastón, La Mar o Panchita no solo depende de la calidad de la gastronomía, sino de la actitud y el compromiso de cada persona involucrada.
Bancolombia (Colombia):
Esta institución financiera destaca por fomentar una cultura basada en principios de inclusión, crecimiento y responsabilidad social. Gracias a esta orientación interna, se consolida como una de las marcas más admiradas de América Latina, alcanzando un alto nivel de confianza interna y externa.
Rappi (Latinoamérica):
El crecimiento acelerado de esta compañía de servicios tecnológicos no sería posible sin una cultura corporativa basada en la autonomía, la colaboración interdisciplinaria y la adaptabilidad al cambio, aspectos clave para mantener un crecimiento sostenible en un mercado tan competitivo.
Estos ejemplos demuestran que una cultura empresarial sólida no solo respalda la operación interna, sino que fortalece la posición de la empresa en su sector, construye reputación e inspira a otras organizaciones a invertir en este camino.