Construye una organización pensante: 6 premisas

Construye una organización pensante: 7 premisas

Una organización pensante, no es un término duro para referirse a un equipo de trabajo donde la motivación, el logro y la integración, son las bases de su desarrollo, por haber atravesado una real experiencia de reflexión con consecuencia.

Imaginemos un equipo de trabajo que no reflexiona en lo absoluto porque de un modo u otro está esperando las indicaciones, no se compromete con la creatividad, tiene miedo de aportar, y donde el liderazgo está anulado. ¿Por qué? Porque uno o dos manejen a su antojo el día, sin que la empresa crezca, debido a que no hay pensamiento que aporte acciones de desarrollo en el negocio.

Veamos este término como un logro, un nivel de apuesta que involucra a los dueños, a los directores, gerentes, mandos medios y a todo el equipo, con un camino del crecimiento que supera una condición de grupo (la que más persiste en los negocios) para definirse como una entidad sólida, por algo que la caracteriza: pensar en equipo.



Una organización pensante como base del éxito en el clima laboral

7 premisas que todo emprendedor debe conocer y desarrollar desde su liderazgo como dueño de un negocio

  1. Significado de organización pensante.
  2. Rol del liderazgo en una organización pensante.
  3. El proceso de ordenar, definir y acondicionar la organización con sus objetivos.
  4. Las organizaciones pensantes y el estrés.
  5. La importancia del criterio frente a la necesidad de acción ágil
  6. Respuesta a la crisis de cambio por parte del Líder.
  7. Riesgos por evitar.

1. Significado de organización pensante.

Cuando hablamos de una organización pensante nos referimos a aquel grupo humano que, siendo reflexivo, se enfoca en el quehacer con consecuencia, derivado de las decisiones tomadas desde el pensamiento.

El pensamiento organizacional, como tal, necesita nutrirse de elementos de aporte a la gestión, como por ejemplo: el criterio, los valores corporativos, el deseo de superar resultados, la visión de equipo, el aporte a la marca, el amor por la propuesta, la ética corporativa, entre otros.

Y no digo que sólo ello deba caracterizarnos si nos adentramos en el ejercicio del pensamiento corporativo: forjar un clima laboral que parta desde una definición clara en la mente de los dueños de cada negocio, es en realidad el criterio macro y base, siempre y cuando allí se instalen los mejores pensamientos, alejados del ego y enfocados en el crecimiento real.



2. Rol del liderazgo en la organización pensante.

El liderazgo es esencial para crear y mantener una organización pensante. Los líderes deben ser capaces de inspirar a su equipo para pensar críticamente, ser creativos y tomar decisiones informadas. Además, deben ser capaces de fomentar una cultura en la que se valoren y se tomen en cuenta las ideas y opiniones de todos los miembros del equipo.

Enfoque recomendado:

  • El liderazgo debe fomentar una cultura de aprendizaje continuo y de mejora constante en la organización.
  • El líder debe facilitar la comunicación efectiva entre los miembros del equipo, promover la toma de decisiones colaborativa y fomentar la creatividad y el pensamiento crítico.

3. El proceso de ordenar, definir y acondicionar la organización con sus objetivos.

Para crear una organización pensante, es importante tener un proceso claro y definido para ordenar y acondicionar la organización con sus objetivos. Esto implica establecer metas y objetivos claros, y luego trabajar en equipo para desarrollar planes de acción y estrategias efectivas para alcanzarlos. También es importante que la organización tenga una estructura clara y bien definida, con roles y responsabilidades claras para cada miembro del equipo.

Guías:

  • Centrarse en la comunicación efectiva a toda la organización, de  objetivos y metas de la organización que estén bien definidos.
  • Se debe desarrollar competencias clave (especializadas) para poder abordar cualquier área de mejora en cada colaborador.
Como organización pensante el clima laboral puede estresarse y es normal

4. Las organizaciones pensantes y el estrés

Una organización pensante, en proceso, puede descubrir que no cuenta con el equipo de colaboradores adecuado, que no es capaz de resolver procesos básicos o asumir crisis de mercado e inclusive que los niveles de informalidad tales como chismes, malas intenciones y acuerdos informales para quebrar procesos que avanzan, surgen por todas partes.

Los líderes que apuestan por este tipo de implementación saben que el estrés puede darse como una consecuencia normal. La pregunta clave es: ¿Necesitamos mantener todo lo que no aporta o desarrollar una nueva forma de organización centrada en el pensamiento y seguir adelante hasta lograrlo?

Sí. No es fácil y puede ser desalentador en alguna parte del proceso. Los equipos orientados a este tipo de implementación, necesitan estar muy unidos y coordinados para que las emociones no se descontrolen o para recomponer errores.

En algunos casos, los procesos se truncan y las organizaciones no cambian, generando ciclos de intentos sin solución, sin avance y sin crecimiento, donde en muchos casos la rentabilidad nunca despega.

5. La importancia del criterio frente a la necesidad de acción ágil.

En una organización pensante, el criterio es esencial para tomar decisiones informadas y eficaces. A veces, puede ser tentador tomar decisiones rápidas para actuar de forma ágil, pero es importante que los líderes y el equipo consideren todas las opciones y consecuencias antes de tomar una decisión. El criterio debe ser un componente clave de la cultura de la organización, y debe ser utilizado para guiar la toma de decisiones en todos los niveles.

Apuntes:

  • Es importante que la organización tenga un proceso claro de toma de decisiones que permita actuar con rapidez, pero sin comprometer la calidad y la integridad de las decisiones.
  • Es necesario establecer un equilibrio adecuado entre la toma de decisiones basada en datos y la intuición para garantizar una acción ágil y efectiva.

6. Respuestas al cambio por parte de una organización pensante

Las organizaciones pensantes son capaces de adaptarse y responder rápidamente a los cambios en el mercado y en el entorno empresarial. Esto significa que deben ser capaces de evaluar y reevaluar constantemente sus estrategias y planes de acción, y estar dispuestos a cambiar de dirección si es necesario. Además, deben estar abiertos a nuevas ideas y perspectivas, y estar dispuestos a tomar riesgos y probar cosas nuevas.

Consejos:

  • La organización debe estar dispuesta a aprender y adaptarse a los cambios del mercado y a las necesidades de los clientes.
  • Es importante que la organización tenga un enfoque proactivo y esté dispuesta a tomar riesgos calculados para aprovechar nuevas oportunidades de crecimiento.



7. Riesgos por evitar.

Aunque la construcción de una organización pensante puede ser muy beneficiosa, también hay algunos riesgos que se deben evitar.

  • Es importante evitar la formación de grupos de trabajo aislados, en los que cada equipo trabaja en su propia burbuja sin comunicarse con el resto de la organización.
  • Una mentalidad de "grupo de pensamiento" en la que todas las ideas son similares y no se fomenta la diversidad de pensamiento y perspectivas también puede ser un riesgo.

La mejor forma de evitar estos riesgos es dinamizando el aporte de todos los integrantes, al mismo tiempo que se eleva el nivel de los aportes, desarrollando procesos de capacitación.

Construye una organización pensante: 7 premisas

Escrito por: Sergio González Marín

Director de Overflow Emprende. Consultor Integral e Investigador del Emprendimiento en el Perú. Enfocado en el diseño de estrategias de innovación, marketing y ventas. Asesor de Emprendedores. Escritor y Coach de emprendedores.

Fecha: 12/05/2023

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